2 feb 2017

como usar a la luna para consagrar a tus imagenes de la muerte

Cómo aprovechar las fases de la luna 

¿Qué papel juega la luna y sus fases en la consagración de nuestras imágenes, talismanes y demás elementos que usamos, ya sea en nuestro altar o como amuletos de protección?.
La luna, por sus cualidades, aporta una energía muy potente, es el astro que está más cerca de la tierra, está muy cerca de nosotros, es un astro que representa la fertilidad y la energía femenina en toda su expresión,  y está por ende ligada completamente con las emociones humanas. Es muy común, entonces, que la gente quiera aprovechar estas cualidades para recargarse de energía o recargar de energía, ya sea los talismanes personales o los elementos de nuestros altares. Es muy común hoy en día, leer artículos y recomendaciones para llevar a cabo esto, basados en las experiencias personales de muchos practicantes de magia y de lo que han leído sobre astrología en libros y artículos de internet, y desde luego, las recomendaciones que mayor validez tienen dentro de esta enorme baraja de opciones, son las que se han llevado a cabo de forma empírica, es decir, aquellas que han sido comprobadas por quien las realizó y dieron buenos resultados.
La luna carece de luz propia, la luz que proyecta es simplemente el reflejo de los rayos solares, pero el hecho de carecer de luz propia no demerita la fuerza magnética que posee, la fuerza de atracción que ejerce sobre la tierra es muy fuerte, podemos verlo en las mareas por ejemplo. No es descabellado entonces pensar que independientemente de la fase en que se encuentre, la luna sigue ejerciendo una gran influencia sobre la tierra y sus habitantes, aunque tampoco crearemos debate ni vamos a negar que dependiendo la fase en que se encuentre y la luz que proyecte, sus virtudes varían, de modo que lo que voy a describir a continuación obedece a mi experiencia personal y a las recomendaciones dadas por personas con más conocimiento del tema. Aunque cabe aclarar que es la comprobación de su efectividad lo que me impulsó a compartir estas líneas con ustedes.    

Consagración por vez primera de imágenes, elementos y amuletos, ya sea de uso personal o que se depositan en los altares, se hace utilizando a la luna nueva como fuente de energía. La luna nueva es en términos prácticos el comienzo del ciclo lunar, por ende, la energía que desprende, pese a carecer de luz, es propicia para consagrar, por ejemplo, tu imagen de la santa muerte cuando recién la has adquirido; independientemente de los rituales que hayas ejecutado durante el día, tanto con la imagen como con el espacio del altar. Solo necesitas un plato de barro o bien un plato blanco de loza, azúcar y un vaso de cristal con agua tomada directamente del grifo. Y procederás de la siguiente manera: justo cuando se oculte el sol y la luna se asome, fuera de tu casa vas a poner el azúcar dentro del plato, sobre el azúcar y dentro del plato tu imagen, tus amuletos o elementos que quieras consagrar, colocas el vaso con agua frente a estos, y listo, lo dejas toda la noche. A la mañana siguiente recoges todo, riegas el agua y el azúcar en la entrada de tu hogar, y habrás terminado.  

Purificación y recarga energética de imágenes, elementos y amuletos, ya sea de uso personal o que se depositan en los altares, se hace utilizando a la luna llena como fuente de energía. La luna llena, es por mucho la que más influencia tiene sobre la tierra y se puede aprovechar su energía para purificar y recargar. Es una buena idea entonces, que cada mes se desmonte el altar el dia que iniciara la luna llena, se deben limpiar cuidadosamente tanto las imágenes como los elementos que lo componen, posteriormente se va a preparar fuera de la casa una superficie en donde se puedan colocar, un mantel blanco o pliego de papel china color blanco, se va a tener listo un plato de barro o blanco de loza con sal de grano dentro y un vaso de cristal con agua tomada directamente del grifo. Tan pronto aparezca la luna llena en el cielo, se procederá a colocar el mantel o papel blanco sobre la superficie que destinamos para este fin, sobre esta se acomodan todas las imágenes y elementos que quitamos del altar, colocamos el plato con sal y el vaso con agua frente a estos, y se deja toda la noche. A la mañana siguiente, se recoge todo, la sal se vierte en el agua, se revuelve y se tira en la entrada de la casa y se vuelve a montar el altar. La energía que adquiere el altar luego de esto, se percibe de inmediato.      

La Muerte y la luna llena